Como parte de su compromiso con la sostenibilidad y la innovación, Direx ha instalado un sistema de placas fotovoltaicas en la azotea de su sede en Tenerife. Este paso marca un hito en el esfuerzo de la empresa por reducir su impacto ambiental y aumentar su competitividad en el mercado.

En un mundo donde la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) adquiere una relevancia cada vez mayor, las compañías que integran prácticas sostenibles en su operación no solo contribuyen a la protección del medio ambiente, sino que también ganan en eficiencia y atractivo frente a sus clientes y socios. Direx se une a esta tendencia global apostando por las energías renovables, un movimiento clave en la transición hacia un futuro más verde.

La instalación de estas placas no solo permite a Direx generar su propia energía limpia, sino que también refuerza su compromiso con la lucha contra el cambio climático. Esta acción busca reducir significativamente su huella de carbono y contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente al ODS 7, que promueve el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna. Entre las metas de este objetivo se encuentra aumentar considerablemente la proporción de energía renovable dentro de la matriz energética mundial.